Por Angel Maldonado Acevedo
Los profesores Juan Carlos Puig Hernández y Fernando Medina Carrillo, ambos de la Universidad de Puerto Rico en Arecibo, han obtenido la aprobación de dicha institución para el desarrollo de un sendero ecoturístico e histórico que comunicaría al recintos de Arecibo y Utuado de la Universidad de Puerto Rico. Este sendero transcurriría, según sus proponentes, por algunas carreteras secundarias, trillos y senderos abandonados y algunos caminos vecinales históricos por los sectores
Los profesores Juan Carlos Puig Hernández y Fernando Medina Carrillo, ambos de la Universidad de Puerto Rico en Arecibo, han obtenido la aprobación de dicha institución para el desarrollo de un sendero ecoturístico e histórico que comunicaría al recintos de Arecibo y Utuado de la Universidad de Puerto Rico. Este sendero transcurriría, según sus proponentes, por algunas carreteras secundarias, trillos y senderos abandonados y algunos caminos vecinales históricos por los sectores
La Planta, La Guinea, Cantagallo y otros de la municipalidad de Arecibo. El sendero transcurriría por trillos y veredas que bordean o cruzan el Bosque Estatal del Barrio Río Abajo de Utuado, e incluye también su paso por sectores del Barrio Santa Rosa, un barrio casi totalmente despoblado de Utuado. Atravesaría zonas del Cayuco y Jácanas, en el Barrio Caguana de Utuado y de Salto Arriba donde ubica la Universidad de Puerto Rico en Utuado.
La exposición de este proyecto tan novedoso se llevó a cabo en la Universidad de Puerto Rico en Utuado durante la actividad llamada Casa Abierta Cultural que se celebró hace algunos días en este recinto.
Durante los pasados meses Puig Hernández y Medina Carrillo han andado y desandado las zonas boscosas de la frontera entre Utuado y Arecibo, han dialogado con campesinos y han recogido un tesoro de historias orales. Han documentado, además, las ruinas de viviendas y el trazado de los viejos senderos. Todavía le quedan por eslabonar tramos a la ruta en unas áreas en la Guinea y La Planta, en Arecibo, donde el sendero, como el del famoso cuento de Borges, se bifurca en las abras insondables que sólo los campesinos que llevan mucho tiempo viviendo en los sectores pueden descifrar.
El proyecto tal vez no sea el Camino de Santiago de nuestro país, como sugirió la Dra. Marisol Dávila, de UPR Utuado, pero sin duda abriría una ruta para el caminante, el observador de la naturaleza, el científico y el académico, el turista que gusta de la buena conversación con los campesinos. Atravesaría áreas donde todavía perviven los estilos de vidas desconocidos en las zonas urbanas. El camino cruzaría parte de la zona kársica, que es rica en especies vegetales y animales. Los proponentes estiman que una caminata de recinto a recinto, podría tomar unos tres días, incluyendo el tiempo que se tome en pernoctar en la ruta.
Este novedoso proyecto sin duda necesita el apoyo de ciudadanos e instituciones del país, de manera que el sendero propuesto se conserve siempre limpio, sus accesos asegurados y garantizado el propósito cultural que le da vida.
En una conferencia llevada a cabo en la Universidad de Puerto Rico en Utuado el profesor Medina Carrillo invitó a las autoridades del recinto utuadeño de la UPR para que contribuyan a darle vida a este proyecto, si posible a incorporar al recinto de Ponce de la UPR de manera que se pueda caminar de costa a costa, a través de toda la montaña y los valles norteños y sureños por el primer sendero ecológico de Puerto Rico.
El autor es periodista, dirige la Oficina de Exalumnos en UPR Utuado
La exposición de este proyecto tan novedoso se llevó a cabo en la Universidad de Puerto Rico en Utuado durante la actividad llamada Casa Abierta Cultural que se celebró hace algunos días en este recinto.
Durante los pasados meses Puig Hernández y Medina Carrillo han andado y desandado las zonas boscosas de la frontera entre Utuado y Arecibo, han dialogado con campesinos y han recogido un tesoro de historias orales. Han documentado, además, las ruinas de viviendas y el trazado de los viejos senderos. Todavía le quedan por eslabonar tramos a la ruta en unas áreas en la Guinea y La Planta, en Arecibo, donde el sendero, como el del famoso cuento de Borges, se bifurca en las abras insondables que sólo los campesinos que llevan mucho tiempo viviendo en los sectores pueden descifrar.
El proyecto tal vez no sea el Camino de Santiago de nuestro país, como sugirió la Dra. Marisol Dávila, de UPR Utuado, pero sin duda abriría una ruta para el caminante, el observador de la naturaleza, el científico y el académico, el turista que gusta de la buena conversación con los campesinos. Atravesaría áreas donde todavía perviven los estilos de vidas desconocidos en las zonas urbanas. El camino cruzaría parte de la zona kársica, que es rica en especies vegetales y animales. Los proponentes estiman que una caminata de recinto a recinto, podría tomar unos tres días, incluyendo el tiempo que se tome en pernoctar en la ruta.
Este novedoso proyecto sin duda necesita el apoyo de ciudadanos e instituciones del país, de manera que el sendero propuesto se conserve siempre limpio, sus accesos asegurados y garantizado el propósito cultural que le da vida.
En una conferencia llevada a cabo en la Universidad de Puerto Rico en Utuado el profesor Medina Carrillo invitó a las autoridades del recinto utuadeño de la UPR para que contribuyan a darle vida a este proyecto, si posible a incorporar al recinto de Ponce de la UPR de manera que se pueda caminar de costa a costa, a través de toda la montaña y los valles norteños y sureños por el primer sendero ecológico de Puerto Rico.
El autor es periodista, dirige la Oficina de Exalumnos en UPR Utuado